El
concepto de igualdad de oportunidades está directamente relacionado con el
ideal de justicia. Esto quiere decir que se considera que no puede existir una
verdadera justicia si no hay mecanismos sociales que garanticen una igualdad
entre los individuos. La diferencia entre igualdad e igualdad de oportunidades.
Es
evidente que ha habido y hay diferencias entre los seres humanos. De hecho, las
diferencias son muy diversas: de índole económica, social, cultural o
intelectual. Estas diferencias crean desigualdades, lo cual provoca un
sentimiento de rechazo en algunas personas, quienes consideran que es injusto
que unos tengan mucho de todo y otros no tengan prácticamente nada simplemente
por alguna circunstancia ajena a su voluntad (por ejemplo, por haber nacido en
un país pobre). La idea de desigualdad sería el factor que desencadena un ideal
de justicia y, al mismo tiempo, la necesidad de crear mecanismos que nos
igualen. En general, se considera que la justicia se basa en la igualdad y, de
hecho, en la mayoría de constituciones se subraya la idea de que todos los
individuos son iguales ante la ley (en otros periodos históricos no existía la
igualdad ante la ley, ni siquiera desde un punto de vista teórico).
Para que
la igualdad no sea simplemente una cuestión formal y teórica es necesario que
en una sociedad se pongan en marcha políticas de igualdad de oportunidades. En
otras palabras, la igualdad de oportunidades implica que todos los individuos,
independientemente de su origen o condición social, deben tener la posibilidad
de disponer de los mismos recursos o servicios (las oportunidades) para
desarrollar sus vidas.
Derecho a la Igualdad
Las
personas somos diferentes. Tenemos características físicas, capacidades
intelectuales y situaciones sociales muy distintas. Estas diferencias son
evidentes, pero esto no significa que la diferencia entre las personas tenga
que ser ventajosa en todas las circunstancias. Para que haya una idea de
justicia en una sociedad es conveniente que se tenga una clara idea de la
igualdad. Las diferencias entre las personas se igualan a través del derecho.
Hay una serie de documentos históricos ( la declaración de derechos humanos, de
los derechos del hombre... ) que expresan la idea de que el hombre tiene unos
derechos individuales. Uno de los derechos individuales más importantes es el
Derecho a la igualdad.
¿De
dónde viene esta idea? Los griegos de la antigüedad fueron los creadores de la
filosofía occidental. Reflexionaron sobre la naturaleza y también sobre la
ética y la sociedad. Fueron los impulsores de la democracia y ésta se basa en
dos ideas: la isegoría y la isonomía. La isegoría significa que todos los
ciudadanos son iguales en una asamblea, no hay unos por encima de los otros. La
isonomía quiere decir que todos somos iguales ante la ley. Estos dos conceptos
están en el origen de la igualdad y, por consiguiente,
en el concepto de Derecho a la igualdad.
El
derecho a la igualdad existe cuando una legislación lo contempla y lo protege.
A lo largo de la historia se ha ido ampliando esta idea. Durante muchos años
las mujeres no eran iguales ante la ley ( por ejemplo, no podían votar ). Los
esclavos eran ciudadanos de inferior categoría y no eran iguales principalmente
por su raza. En algunos países, la homosexualidad es motivo de discriminación
legal. Estos ejemplos demuestran que el Derecho a la igualdad se contempla en
las leyes (principalmente en las legislaciones de naciones democráticas ) para
intentar que las diferencias por razones de sexo, condición social o raza entre
las personas no discriminen a las personas.
Pensemos
en el símbolo de la justicia: una mujer con una balanza y los ojos tapados con
una venda. El mensaje de este símbolo es sencillo, que la justicia es verdadera
solamente si ignora las diferencias entre los individuos, es decir, considera
que todas las personas son exactamente iguales ante la ley. Por este motivo,
seguimos hablando de la igualdad en muchos de los debates actuales. Existe la
igualdad de género cuando las leyes y reglamentos garantizan que hombres y
mujeres se encuentran en las mismas condiciones. Y existe la idea de la
igualdad de oportunidades. Este concepto es clave dentro del derecho a la
igualdad y significa que, independientemente de nuestras condiciones
personales, todos tenemos la posibilidad de participar en las mismas
circunstancias que los demás.
La igualdad de oportunidades en la educación
Es en el
ámbito educativo donde mejor se aprecia la igualdad o desigualdad de
oportunidades entre las personas y en el que más se debería legislar e invertir.
Si no existe un sistema público de enseñanza que garantice el acceso a la
educación de toda la población se produce una clara situación desigual en una
sociedad, pues unos niños aprenden y otros viven en la ignorancia. En general,
se considera que es injusto que un niño no pueda educarse porque es pobre,
porque sus padres le obligan a trabajar o por cualquier otro motivo.
Para
convivir en una sociedad justa y con valores humanos es necesario que la
educación de una nación incorpore criterios de igualdad de oportunidades. El
principal es la escolarización universal de toda la población en edad escolar.
Muchas personas pierden las esperanzas de tener acceso a los estudios superiores. Entre varios motivos existe la necesidad de conseguir trabajo que ayude a obtener los ingresos necesarios para llegar a fin de mes. Los trabajos poco cualificados demandan cada vez más tiempo por una baja remuneración lo que restan capacidad de dedicación a los estudios. Y con ello se inicia una espiral que solo logra agudizar aún más la desigualdad.
Y que decir de ese triste y preocupante fenómeno que está ocurriendo en nuestro país desde hace ya bastantes; demasiados, años; la llamada “fuga de cerebros”, jóvenes preparados, muchos de ellos con grandes ideas, con ilusión que deben dejar nuestro país ya que aquí no tienen opción de desarrollar una carrera profesional como debieran, cuyos logros en vez de repercutir y beneficiar a su país de origen, benefician al país que los acoge.
Una educación pública, de calidad, en la que se garantice la igualdad de oportunidades es la mejor inversión que puede hacer un país a medio y largo plazo pues al no cuidar la educación pública, la educación de todos, dejaremos en el camino a niños con grandes capacidades que no podrán desarrollarlas, o dejaremos también a niños sin quizás esas grandes capacidades pero con un sentido de esfuerzo y dedicación que también podrían aportar mucho mas en una sociedad justa e igualitaria.
Isabel Lopez.-